El pasado viernes, gracias a la amabilidad y la
atención desinteresada de Emilio, dueño de La Dehesa , los socios discapacitados de AMAGUA
disfrutaron de un día de verano en buena compañía en la agradable piscina de
las instalaciones que ofrece La
Dehesa.
En un entorno tranquilo, ambientado al tono del
verano y con unas instalaciones adaptadas, los niños pudieron recrearse entre
compañeros y cambiar su programa habitual con una atractiva actividad de Ocio y
Tiempo Libre. Sin olvidar que las actividades acuáticas son
fundamentales para potenciar todas sus habilidades motrices. La natación es una
terapia muy segura, la flotabilidad del agua reduce el estrés existente sobre
los músculos otorgándole a la persona una amplia gama de movimientos y
coordinación. Además, el medio líquido favorece el desarrollo neurológico. Toda una ventaja para la mejor de la calidad de vida
de los minusválidos. Otra vez gracias a ti Emilio por invitarnos y pensar
en los niños de AMAGUA.
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